Así nos dejas,Willi. Rotos, destrozados y llorándote por las esquinas de esta Escudería que era la tuya. Qué tristeza ayer en Hermigua. Nuestro pueblo estaba triste, muy triste. Te habías ido así, modesto como eras, sin hacer ruido, durmiendo y de pronto todo se acabó: la ilusión por haber terminado de pintar el coche de carreras, las ganas de estar en la Subida a Guía de Isora, ahora que podías, ahora que podíamos, acompañarte junto a Roberto, para disfrutar -casi como si estuvieramos dentro de tu Peugeot--, de una nueva carrera. Ahora que el gofio gomero, en el que tanto trabajaste, estaba dando sus frutos.
Todo al traste porque alguien o algo decidió que tenías que dejar de funcionar, que el motor de tu cuerpo no podía más (pero, coño, es que eras joven, no fumabas, no bebías…). Y sí, así nos dejas, aquí tirados y doliéndonos el alma de tanto vacío y tanta pena como tenemos en el corazón.
Te echamos de menos. Lo vamos a hacer durante mucho tiempo. Ya no va a ser lo mismo trabajar por la Subida de Hermigua, ya no tendremos con quién reirnos, a quien "funchar" por las perras ni a quien nos ría las gracias en las noches de esfuerzo por el mundo del motor. Todavía veo esa sonrisa tuya, de medio lado, apenas adivinada en la comisura de la boca, la que nos ponías cuando querías quitar la tensión del trabajo duro por la carrera de tu pueblo.
Nos dan ganas de rendirnos, de no hacer nada, de mandarlo todo al…. pero no podemos. Por ti, por tu recuerdo y por tu memoria, vamos a trabajar más que nunca en la subida de Hermigua. Por que te mereces que no dejemos caer los brazos --nuestros años de trabajo nos ha costado sacar esto adelante, ¿verdad amigo?--. Nuestras calenturas y nuestros sinsabores…pero qué bonito cuando todo acaba, y nos sentamos en la Molina a cenar y a reirnos. Sabemos que siempre estarás con nosotros porque cuando nos vamos, cuando abandonamos esta vida, permanecemos en la memoria de quienes nos han querido. Y a ti te ha querido muchísima gente y te siguen, te seguiremos… queriendo.
Roberto, Verónica, Oscar, Eva, Dionisio, Reyes, Rubén, Clari, Ventura, Agustín, Jonaito, …todos, absolutamente todos, hemos querido acompañar a tus familiares en estos días aciagos y grises en los que así nos has dejado, Willi. Tanto como tenías por hacer, tanto que exigías a una vida, que pese a tu juventud, te debía muchas cosas; tanta ilusión detenida de golpe en esa curva, imposible de trazar, que a veces tiene la existencia.
Siempre tendrás un sitio en nuestra carrera, un dorsal en tu coche, un número en la lista de inscritos y, no lo dudes, el puesto más alto en nuestro podium.
Fuente: Escudería Guajilapa-Hermigua
