El conjunto canario de tenis de mesa Defense La Palma no pudo con el equipo catalán el CTT Ripollet, ante el que cedió por un apretado 3-4, en el encuentro correspondiente a la decimosexta jornada de Liga de División de Honor, disputado en el Manuel Galván el pasado sábado.
Los palmeros, que celebraban la permanencia en la categoría, cedieron ante un equipo necesitado del triunfo para su porvenir en la categoría y, que, se mostraron angustiados en todo momento por su situación en la clasificación. Los catalanes llevaron el encuentro, en el momento clave, a la rivalidad personal más que a la deportiva cuando el Defense tenía la victoria en el bolsillo, dando la inesperada vuelta al resultado final.
El encuentro empezaba bien para el conjunto canario que se anotaba el primer punto con la victoria del jugador defensivista Gaston por un cómodo 3-0 ante un nervioso Long Li Yi. En el segundo partido igualaba el encuentro el conjunto catalán con la victoria de Cristobal García por 0-3 ante David Muriel. Luego, los palmeros conseguían un punto importante para volver a adelantarse con la victoria por 3-1 del grancanario José Miguel Nuez al jugador catalán Miquel Arnau. La presión se la encontraba encima el Ripollet, que estaban obligados a ganar el partido de dobles para mantener las opciones de victoria. Así la pareja visitante Cristobal-Long vencía a Gaston-Nuez y se volvía a igualar el encuentro.
Después del partido de dobles el encuentro quedaba como al principio y no había nada decidido. Tocaba el turno que enfrentaba a los dos bases logrando la victoria el argentino para el Defense por 3-2 ante Cristobal García, en un sufrido partido de mucha rivalidad. El punto logrado por Gaston era clave para los palmeros que se ponían con un parcial de 3-2 a favor y, a tan solo, una victoria del triunfo final. Éste, pudo llegar en el partido que Nuez disputó ante Long Li Yi, cuando iba ganando el grancanario 2-0 y en el tercer set dominaba el parcial por 10-7. En ese momento cambió todo. El jugador del Ripollet dio la vuelta al parcial y ambos jugadores, que fueron sancionados con tarjeta amarilla, entraron en una rivalidad personal más allá de lo deportivo beneficiándose el jugador visitante que se llevaba el triunfo por 2-3. Cuando más cerca parecía la victoria de los canarios volvía a igualarse el encuentro. En el último partido se confirmaba la remontada del Ripollet con la victoria de un enchufado Arnau, por 0-3, sobre el desmotivado David Muriel, que no opuso gran resistencia al catalán.
La próxima jornada para los palmeros será de puro trámite, pues será la última jornada de Liga de División de Honor, el 28 de marzo, en la que el Defense no se juega nada.
